Vídeos educativos

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Denominamos vídeos educativos a los materiales videográficos que pueden tener una utilidad en educación. Este concepto engloba tanto los vídeos didácticos como otros vídeos que pueden resultar útiles en los procesos de enseñanza y aprendizaje.

Si atendemos a la estructura de los vídeos, éstos se pueden clasificar en:

- Documental: información ordenada.
- Narrativo: trama narrativa.
- Lección monoconceptual: presentan un solo concepto.
- Lección temática: didáctico.
- Vídeo motivador: impactan.

Las funciones de los mismos pueden ser: informativa, instructiva, motivadora, evaluadora, metalingüística, expresiva e investigadora.

Orientaciones para el uso didáctico de los vídeos: Pueden utilizarse de muchas maneras. Una de ellas es en grupo como fuente de información y para realizar actividades relacionadas con su visualización.

-   Antes de comenzar: Tener todo bien organizado y trabajar previamente los contenidos.

-   Durante la visualización: Parar el vídeo (aunque depende de los alumnos) y evitar las distracciones.

-   Después de la visualización: Hacer debates, buscar información complementaria, etc.

A la hora de evaluar los vídeos; es decir, a la hora de ser críticos con un determinado material vamos a centrarnos en tres aspectos: los aspectos funcionales, estéticos y pedagógicos. Vamos a dar prioridad al primero y al último ya que nuestro objetivo en el aula no va a consistir en trabajar lo estético (aunque vamos a ver más adelante que tiene una cierta importancia).

En los aspectos funcionales vamos a fijarnos si el vídeo es realmente útil y eficaz, es decir, si cumple una serie de objetivos que queremos trabajar en el aula. Pero lo fundamental en lo que nos tenemos que fijar es si creemos que va a responder o no a los intereses de los alumnos.

En los aspectos técnicos, estético y expresivos vamos a tener en cuenta los siguientes elementos:

-   Banda sonora: No es una simple música de fondo y no tiene que tener un protagonismo excesivo. Por tanto no tiene que ser conocida.

-   Contenidos: Tienen que estar perfectamente organizados y ser actuales y fiables. Esto no impide que se añadan elementos ficticios pero deben estar claramente diferenciados.

-   Imágenes: Facilitan la comprensión de las ideas. Podemos aprovechar las posibilidades que vienen incorporadas en la cámara (panorámica, zoom) pero no debemos abusar de ellas.

-   Planteamiento audiovisual: Tiene que haber una prefecta interacción entre los tres elementos anteriores. La palabra no describe lo que el espectador ya ve y puede comprender si ayuda.

En lo referente a los aspectos pedagógicos tenemos que tener en cuenta lo siguiente:

-   Capacidad de motivación.

-   Adecuación de los contenidos a las capacidades de los alumnos: Los contenidos están relacionados con contenidos curriculares del nivel al que va dirigido el programa y a los intereses de los niños.

-   Planteamiento didáctico: Los alumnos no se mantienen pasivos. Para pasar de la Sociedad de la Información a la Sociedad del Conocimiento, es necesario dar pequeños pasos, y uno de ellos puede ser que los vídeos promuevan el trabajo posterior tras su visualización: debates, análisis de nuevos problemas, etc.

Ante todo, en un vídeo debe predominar la originalidad, promoviendo la imaginación y la creatividad.